A Pancho lo dejaron herido atado a una barandilla en un puente, por supuesto no llevaba chip. El animal tenía una muela carnicera que se le estaba infectando y apenas podía comer.
Pancho es el perro que todos quisieran tener, es bueno, traquilo, cariñoso y muy aseado.
Se nota solo con conocerlo que es un perro que ha estado toda su vida viviendo en una casa, cuando está en el interior está tranquilo y calmado, no se hace sus necesidades en la jaula, nada, espera pacientemente a salir a jugar para hacerlas.
Pancho necesita un hogar donde sepan valorarlo y quererlo y sobre todo unas personas que lo consideren parte de la familia y no vuelvan a abandonarlo.
No se lleva bien con otros perros pero es genial para una persona que quiera disfrutar de un perro educado y cariñoso.