Lubi vagabundeaba por el centro de Alcoy cuando nos la subieron al albergue. Ella y su anterior compañera entraron con muy pocos días de diferencia y debido a su parecido pensaron que eran hermanas. Lubi lo pasó realmente mal cuando adoptaron a su compañera, pero ahora con Faro ya lo tiene más que superado.
Le gusta mucho salir a jugar, correr y que la hagas rabiar tocándole la barriga, pero lo que más le gusta es la compañía humana, siempre busca el cariño y la caricia de las personas.
Lubi es uno de los perros considerados potencialmente peligrosos, por lo que el posible adoptante deberá poseer licencia, seguro, etc.
Ella también padece leishmania y está en tratamiento continuo.
Todos lo que quisieran adoptar a Lubi deberá tener en cuenta, tanto los requisitos como perro denominado potencialmente peligroso, como su enfermedad, ya que requiere tratamiento y control veterinario continuo.
La protectora en casos de perros denominados así o perros enfermos solicitará requisitos especiales a su posible adoptante por el bienestar del animal.